El síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad poco frecuente cuya causa exacta se desconoce, aunque por lo general es precedida por una enfermedad infecciosa, como por ejemplo una infección respiratoria o una gastroenteritis viral.
Como consecuencia de lo mencionado -y por una reacción del propio sistema inmunitario del organismo-, comienzan a verse dañados los nervios, generando los síntomas iniciales de esta enfermedad, tales como sensación de hormigueo o pinchazos, que suelen comenzar en los pies y se desarrollan hacia miembros superiores. Se observa debilidad en las piernas y se extiende a la parte superior del cuerpo, generando dificultad o incapacidad para caminar, pudiendo comprometer los músculos de la cara, la capacidad de hablar, masticar o tragar, e inclusive una afección respiratoria que puede necesitar una asistencia respiratoria mecánica.
Estos síntomas dependerán de los distintos tipos y formas de presentación de la enfermedad.
Superada la etapa aguda de la enfermedad -y cuando el paciente se encuentra en condiciones de iniciar su rehabilitación-, en Alcla se elaboran los planes de tratamiento adecuados en función de las secuelas presentes en el paciente. En la mayoría de los casos, se logra recuperar la fuerza motriz en un tiempo aproximado al año de tratamiento.